Embarazo: Preparación para la lactancia

Amamantar es un momento íntimo y sublime. La lactancia materna es el mejor alimento que tu bebé puede recibir al menos hasta los 6 meses de vida. Por eso es importante durante el embarazo comenzar a prepararnos, pero no nos centremos en “preparar los pezones", existe mucho mito sobre esto, sino en preparar la cabeza con información, herramientas y centrarnos en el deseo de amamantar. Recomendamos tener una entrevista previa con una puericultura para preguntar sobre las dudas y miedos que aparecen en esta etapa. Es importante saber que la forma y el tamaño de los pechos no determinan la capacidad de una mujer de producir leche, como tampoco la forma de los pezones. Todas las mujeres producen leche de buena calidad y en cantidad suficiente porque es un proceso regido por la ley de la oferta y la demanda: cuanto más se lo amamante, más leche se producirá.

Imagen: Adrián Arellano Fotografía

Evitar usar ropa ajustada, airear los pechos y los pezones, exponiéndolos al aire y al sol unos minutos por día, en el caso de querer hacerlo pero tampoco es imprescindible, y tampoco es necesario usar ningún tipo de cremas .

Una vez que él bebé nace, es muy importante colocarlo al pecho desde la primera hora de vida, momento sagrado para la mamá y bebé. Deben estar en contacto piel con piel, permitiendo que explore el pecho hasta que se prenda, en ese momento él bebe se encuentra en estado de alerta, en muchas ocasiones despierto, tranquilo y receptivo para alimentarse, luego vendrá una etapa en la que duermen mucho y podría llegar a sea algo más complicado lograr esa primer prendida. Con esto queremos decir que un motivo para preocuparte no es la lactancia en este momento, pero si para ocuparte en buscar y recibir información para que el primer encuentro que es por medio de la primer prendida al pecho sea un momento de plenitud como lo soñaste.