¿Por qué llora mi bebé?

El llanto es la forma que el bebé tiene de expresarse y comunicarse para ser socorrido cuando esta desregulado a causa de hambre, frío, sueño, incomodidad, dolor, revisar el sonido y las luces altas. Hay que entender que un bebé pasa nueve meses en la panza de su mamá y cuando nace se siente desprotegido y con miedo, este es el mayor causante del llanto en los primeros días de vida. Conocer y entender el llanto del bebé, es un gran desafío para los padres, requiere de paciencia y tiempo para conocerse.

A continuación te detallo alguno de sus motivos:

Hambre: Cuando el bebé llora es una señal tardía de hambre, este bebé dio señales de hambre anteriormente sin ser atendido, como chuparse sus manos de forma desplacentera y/o girar la cabeza para uno de sus costados buscando el pecho haciendo murmullos . En el recién nacido el llanto suena como una"eeee" constante, que viene acompañado de gestos. Si se espera al llanto se va a encontrar demasiado desregulado para alimentarse y estará mucho más agitado, comerá más nervioso, tragando aire que conllevará a tener gases y dolores de panza después. Por este motivo es importante reconocer las señales de hambre.

Dolor: Sus ojos están cerrados, no mira a ningún sitio y presentan mucha tensión. La opción de ponerlo al pecho muchas veces no logra el propósito de calmarlo.

Miedo: Suele ser el llanto responsable de desvelar a familias noche tras noche. Es el más difícil de detectar por el poco conocimiento sobre el miedo en los bebés. La falta de contacto físico, hace que ese bebé entre en estado de pánico por la inseguridad que le genera estar lejos de su mamá o de quien sea ese cuidador a quien conoce. Por las noches se acrecienta la necesidad de apego, la oscuridad los hace sentir aún más vulnerables y en peligro, (como en otras medidas nos sucede a los adultos), y podemos notar que en su mirada busca con desesperación.

Enojo: Necesidades no satisfechas, frustración. Su mirada se dirige a un punto fijo poniendo resistencia.

Angustia de separación: El bebé irrumpe con un llanto muy intenso, cuando su mamá se separa de el físicamente.

Existe también el "llanto crepuscular" o la "hora de las brujas" que se define como un estado de irritabilidad y llanto de causa inexplicable que tienen los bebés de menos de tres meses, se habla del horario de las brujas porque sucede un espacio temporal muy limitado entre las 20 y 21 horas de la noche, pero se puede empezar a advertir a partir de las 18 horas de la tarde dependiendo la época del año, siempre comienza con la caída del sol, que se asocia con momentos de angustia de la mamá y el bebé, suele repetirse día a día en el mismo horario. Hay que contener a tú bebé en brazos, caminarle, hablarle, recomiendo adelantarnos con un baño tibio para que se relaje o realizar algunos masajes de Shantala puede ser una buena y eficaz alternativa. Con el paso de los días se acostumbrará a ese cambio de día a noche, y suele desaparecer dentro de los 15 días. Muchas veces el bebé rechaza el pecho por lo que la mamá lo confunden con alguna crisis de lactancia.

Aprovecho para recordarles que un bebé menor a 6 meses siempre debe ser atendido frente al llanto, no es recomendable dejarlos llorar para que "se acostumbre" o peor aún para que "abra sus pulmones", si llora es porque está necesitando de algo que él no puede regular y necesita de atención, los bebés no saben de "tomar el pelo". El llanto los estresa, aumentando significativamente el CORTISOL (hormona que se libera en respuesta al estrés), y que en altos niveles repercute intoxicando y afectando su cerebro. No es el llanto en sí lo que lo afecta sino la congoja prolongada y desconsolada. Habrán notado que un bebé luego de llorar por mucho tiempo cae dormido, esto tiene que ver con el nivel alto de estrés al que se lo expuso.